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Por qué no me gusta dejar propinas

Estoy en el país de las propinas - EEUU -, donde es habitual dar bastante propina, entorno a un 10-15% de lo que te hayas gastado. En mi país - España - también se da propina, pero no de una forma tan sistematizada y asimilada por la sociedad.

Y tras unas semanas aquí, mi mente ha vuelto a mi propio debate sobre las propinas, el cual quiero explicar aquí.

¿Por qué damos propinas? ¿Cuál es la idea detrás de dar un dinero extra por un servicio?


Se supone que damos propina porque el servicio es excelente, porque el personal nos ha atendido mejor de lo esperado, o nos ha sacado una sonrisa. También, y sobre todo en EEUU, se tiene muy presente el hecho de que los camareros cobran muy poco, por lo que es el deber del cliente darle una ayudita con cada consumición.
No paran de decirme "es que estos chicos cobran muy poco y, en muchos casos, las propinas les hacen llegar a fin de mes". Similares expresiones he oído en España. De hecho, yo he tenido trabajos en los cuales las propinas han supuesto en torno al 15-20% de mi salario total.

Entonces, ¿por qué no quieres dar propinas? ¡No te cuesta nada!

La primer razón es simplemente quisquillosa: porque yo ya estoy pagando, impuestos incluídos, por un servicio, cuyo precio estaba pactado de antemano, ¿por qué he de pagar un gasto oculto?

La segunda razón, para mí la más importante, es ética. Al pagar propinas estamos propiciando que el salario sea menor, porque las propinas suplen esa demanda de salario, que debería ser canalizada hacia el empleador. Lo que estamos haciendo es librar al empresario/gestor de turno de pagar más impuestos y Seguridad Social del trabajador, puesto que le estamos dando a sus trabajadores una parte del salario en negro. Y, por supuesto, el trabajador también está más contento, ya que recibe unos ingresos totalmente exentos de impuestos y la declaración de la renta.

Obivamente, el último punto no es legal, como podemos leer aquí. Pero es de esas cosas a las que nadie hace caso, puesto que son difíciles de controlar y "toda la vida se ha hecho así".

En fin, que pienso que dando propinas se le da energía a la rueda de trabajos precarios y bajos salarios, con el plus añadido de menos dinero para el estado y para la jubilación de los empleados. Aunque con el estado que tenemos en mi país natal, tampoco debería ser este un gran motivo de preocupación...

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